Cómo elegir comida saludable y comer más sano

Estoy muy contento de que estéis interesado en leer sobre este tema tan importante para nuestras vidas. Pasamos muchas horas comiendo, lo hacemos cada día, por eso es vital saber cómo hacerlo correctamente, ya que los medios de comunicación y la escuela nunca te lo contarán.

Hay todo un sistema montado que vive de mantenerte ignorante respecto a cómo te alimentas ya que si supieras hacerlo todas las industrias «alimenticias» que forman parte de él caerían como moscas, porque nadie les compraría.

A grandes rasgos alimentarte saludablemente significa incluir en tu dieta (cada vez en mayor proporción) bebidas y alimentos nutritivos, es decir que ALIMENTEN. Esto podría sonarte obvio, pero no lo es, ya que la mayoría de los alimentos que encontramos en el supermercado precisamente no alimentan y más adelante veremos por qué.

Elige alimentos de proximidad

Encuentra en tu pueblo o ciudad un lugar donde vendan frutas, verduras y productos de productores locales por estas razones: van a ser de temporada y frescos, no van a ser enviados desde kilómetros, lo cual le quitaría gran parte de sus nutrientes.

Ojo, incluso una manzana por más orgánica que sea, si es enviada desde China hacia otro pais perdería gran parte de sus nutrientes, por ende, en este punto no estamos disputando entre orgánico de no-orgánico sino más bien en acceder a alimentos que estén cerca de nosotros y así de esta manera estamos seguro de que están frescos y con todas sus propiedades intactas. Buscar productores cercanos y si es orgánico mejor.

Elige alimentos cultivados en tierra

En algunos casos las lechugas son cultivadas en hidropónico y esto hace que pierdan un %30 de Carotenoides en relación a las cultivadas en tierra.

Siempre lo cultivado en tierra será lo mejor en comparación con los alimentos que no lo son o que hayan sido cosechados con máquinas y químicos.

¿Cómo limpiamos los vegetales?

Aquellos que tengan muchos recovecos , como las col, rúcula, lechuga, hay que limpiarlas en una fuente con agua con un chorro de vinagre e incluso de bicarbonato. Esto limpiará de posibles huevos de insectos, babosas, caracolitos, etc, se despegarán y quedarán en el agua.

Luego esa verdura la colocas bajo el grifo un momento, las pones a secar y la guardas en la nevera. Es importante que al hacer esto no cortes las hojas, sino que las guardes con la hoja entera, ya que si haces lo primero se empezarán a activar los procesos de oxidación y estarás perdiendo nutrientes.

Si no encuentras ningún mercado natural cerca de tu hogar y decides comprar frutas en una verdulería convencional, pela las frutas antes de consumirla porque en sus cáscaras se encuentran alojadas diferentes químicos utilizados para su cosecha.

Conviértete en tu propio Ministro de salud

¿Por qué es interesante aprender a comer más sano?  te diré algo políticamente incorrecto que quizas no te guste, pero es la realidad: hay demasiadas personas que viven de que gran parte de la población esté enferma.

Somos más rentables estando enfermos que sanos, el Estado no cuidará de tu salud, es tu responsabilidad cuidar de ella y si no aprendes a hacerlo la cosa irá mal porque terminarás fabricando alguna enfermedad evitable.

Algunos principios sencillos pero muy útiles:

  • Habitualmente los alimentos más sensillos (aquellos que casi no tienen procesamiento y que habituamente salen de la tierra, como un brócoli) son los mejores para consumir.

  • El sentido común te ayudará a determinar si al ingerir una determinada comida te sentará mal o bien. Para esto es necesario que prestes atención a tu cuerpo, en cómo se siente cuando está frente a un alimento o cómo se ha sentido después de ingerirlo. Si te ha sentado mal en el pasado, es indicio de que no es bueno para tí.

  • Tendemos a alimentarnos bien de forma natural cuando nos sentimos bien. Y para sentirte bien debes cuidar los otros aspectos de tu vida: cuidar tus emociones, hacer un poco de deporte, realizar una actividad profesional que te haga sentir pleno, relacionarte con personas que aporten a tu vida, etc.
    Esto no quiere decir que a veces te des un gusto o que decidas un día simplemente descansar y ver una película.

  • Lo que no solucionamos DENTRO lo comemos AFUERA. Muchas veces comemos en exceso o intoxicamos nuestro cuerpo ingiriendo alimentos dañinos porque hay algún aspecto de nuestras vidas que no nos gusta o que no hemos resuelto. Por ejemplo, en mi caso personal, me ha pasado varios años comer mal porque estaba en un trabajo que no me gustaba y no sabía cómo cambiarlo, entonces cerraba los ojos y comía y comía. A veces pasa lo mismo al respecto de una pareja, un cambio de ciudad o algún asunto pendiente de resolver con alguien.

La buena noticia es que en cuando empiezas a alimentarte bien automáticamente tu claridad mental aumenta: comienzas a pensar y decidir más rápido y mejor. Tener claridad mental te hace elegir mejor los alimentos porque tienes más conciencia en tus decisiones. Es un círculo vicioso del bueno: comes bien>>>piensas bien>>>comes bien>>>piensas bien. Y así.

Hábitos saludables para una mejor alimentación

A nuestro cerebro le encanta los hábitos, así que antes de pelearnos con él vamos a darle lo que quiere: HÁBITOS. Pero de los buenos, porque una vez establecidos funcionarán en tí en piloto automático.

Hara Hachi Bu (come al 70% de tu capacidad porque el otro 30% alimenta al médico, no a tí)

Esta herramienta es super fácil de entender: levantate de la mesa con un poquito de hambre. Esto mantendrá en ti la longevidad y el peso adecuado.Esto no es un invento de alguien que perdió la cordura. Esta técnica japonesa la utiliza hace mucho tiempo la población más longeva de la tierra: Okinawa. Hace poco este conocimiento ha llegado a occidente y podemos sacarle mucho provecho. Pruébalo durante un mes y cuéntanos cómo va 🙂

Cepilla tu lengua por las mañanas

Hazlo de atrás hacia adelante , religiosamente cada mañana. Esto incrementará tus niveles de salud y reducirá considerablemente las posibilidades de que enfermes.

En la lengua se depositan gran cantidad de bacterias que luego se desparraman por los dientes y el resto de la boca. Incluir este hábito a tu rutina mañanera te beneficiará de diferentes modos: mejorará tu capacidad de sentir sabores, eliminará el mal aliento, tu lengua lucirá más saludable (más rosada), exterminarás gran parte de los microorganismos noscivos para tu salud y también de células muertas, etc.

Puedes buscar más información al respecto.

Come más sano para ser un mejor profesional y así avanzar en tu carrera laboral

¿Por qué comer más sano hará que seas un mejor profesional y llevará tu carrera laboral al siguiente nivel? Normalmente no le damos mucha atención a la salud pero tarde o temprano lo haremos. Y mejor temprano que tarde: si empiezas a cuidar de tu salud (por ejemplo comiendo bien) te convertirás en una persona más altruista con mayor predisposición en ayudar al prójimo, por ende estarás más contento y más motivado a la hora de ejercer tu trabajo, sea cual sea.

Si alguna vez te ha dolido una muela puedes entender que cuando nos duele algo (en este caso la muela) nos volvemos egoístas porque en lo único que estaremos pensando es en NOSOTROS MISMOS (en el dolor).

Cuando nuestro cuerpo funciona perfectamente es cuando más estamos disponibles para ayudar a las demás personas.

Y piensa esto: si estás más sano y avanzas en tu carrera profesional podrás darle a tu familia y seres queridos una mejor calidad de vida. Por tanto comer mejor no solo impactará positivamente en tu vida sino en la de los que te rodean.

No te inflames comiendo tóxicos

Vivimos en una sociedad «inflamada».

Si te fijas bien por la calle, la mayoría de las personas tienen el cuerpo inflamado debido al tipo de alimentación que tienen. Con solo mirarlas puedes darte cuenta de qué tipo de hábitos alimenticios tienen. Si te ves inflamado a tí mismo en el espejo , lo podrías solucionar simplemente eligiendo mejor los alimentos y su correcta forma de procesarlos (en caso de que fuera necesario hacerlo), como por ejemplo hervirlos, o cocinarlos al vapor o freirlos con aire, esto último es algo moderno.

Cuando tu cuerpo está inflamado no solo es una cuestión estética sino que también estarás más propenso a contraer enfermedades.

Debes comprender que el hecho de que algo se venda legalmente en un supermercado no lo convierte en algo automáticamente saludable, lo convierte en algo «comible». ¿Puedes ver la diferencia entre algo que se pueda comer y algo que sea saludable para el organismo?

9 ideas clave que mejorarán tu salud (si las aplicas)

1) Pruébate las ideas antes de quedártelas

Con el tema de la alimentación encontrarás una cantidad infinita de información incluso información contradictoria! Algunos te explicarán las razones por las cuales es malo comer pan y al mismo tiempo otros defenderán el consumo del mismo. Habrá una línea de pensamiento que dirá las bondades del vegetarianismo mientras otra línea argumentará en favor de ser omnívoro, etc.

Es muy fácil perderse en esta guerra constante de información contradictoria.

Te sugiero que te pruebes la idea antes de quedártela. Prueba el omnivorismo, prueba el carnivorismo, el vegetarianismo, etc. Ten la mente abierta, lee muchos libros sobre alimentación, aprende mucho y saca tus propias conclusiones acerca de lo que te cae bien.

2) Emplea el sentido común

A medida que vayas encontrando el tipo de alimentación que mejor te sienta, dejate guiar por el sentido común: no es lo mismo las cantidades que deberías comer si en tu día estarás todo el tiempo en casa o todo el tiempo moviéndote.

Valora la temperatura del ambiente: cuando hace mucho calor probablemente te apetecerá comer menos e ingerir frutas y cosas frescas, si hace mucho frío quizás tu cuerpo te pida alimentos más contundentes y calóricos.

La alimentación no puede ser la misma si un día te levantas a las 6AM para trepar una montaña o si será a las 10AM para quedarte trabajando frente al ordenador. Piénsalo.

3) Pregúntate: ¿qué haría una persona que ama la vida ante esta situación?

Cada vez que te sientes en un restaurante, te encuentres en la mesa familiar o en cualquier otra situación en la cual estés preparándote para comer, hazte la pregunta del título. Si te gusta vivir, amas la vida y disfrutas de estar lleno de energía elige lo que comerás primero priorizando la SALUD, segundo el SABOR y tercero el PRECIO.

No lo olvides nunca.

¿Significa esto que debes renunciar radicalmente a darte caprichos? por supuesto que no. Puedes hacerlo de vez en cuando, recuerda que si mantienes el 80% de tu alimentación limpia, puedes hacer la vista gorda con el otro 20% (ley de Pareto).

Yo por ejemplo disfruto a veces de un buen helado o de un buen vino con queso, pero no lo hago todos los días. Cuando estamos bien con la vida no tenemos necesidad de darnos tantos «caprichos».

Si te encuentras constantemente dándote caprichos, lo que tienes que preguntarte es por qué razón necesitas tantos caprichos.Quizás como mencioné más arriba sea algo que debas resolver dentro tuyo: replantearte tu trabajo, la pareja que tienes, la ciudad donde vives o lo que sea que requiera de tu atención.

Observa tu interior sin miedo porque cuanto más te ignores a tí mismo más tóxicos meterás en tu cuerpo.

Ten en cuenta que si lees algo en la etiqueta y no sabes lo que es, en principio no deberías consumirlo. Esto sucede habitualmente con los ultraprocesados.

Tú tienes que saber qué es lo que te llevas a la boca, una naranja es una naranja, un huevo es un huevo, pero si ves algo que nunca has visto en tu vida que fue creado en un laboratorio, en principio no debes consumirlo (a menos que concientemente lo eligas como un capricho del día).

Hay ciertas sustancias de las que debes HUIR: el azúcar, los conservantes y la sal añadida que llevan la mayoría de productos que se venden legalmente en el super.

Averigua dónde puedes encontrar cerca de tu casa un mercado de producción local, donde los alimentos tengan la menor cantidad de procesamiento posible. En mi caso hay un lugar cerca de casa donde compro frutas y verduras orgánicas, mermeladas caseras, pan casero, budines caseros, etc.

Y sorprendentemente, al contrario de lo que muchos creen : es MUCHO más barato que un supermercado.

5) Elige bien el %80 de las comidas y el 20% guardalo para situaciones sociales

Aplica la Ley de Pareto para situaciones sociales,para que no seas el tipo aburrido que arruina las reuniones de familia o con amigos por ser tan estricto con las comidas (y si se enojan contigo por querer mejorar tu salud pues vaya amigos o familia que tienes 😂).

Un buen truco es comer una buena comida saludable en casa para que cuando llegues al encuentro social no tengas demasiada hambre. Una vez allí ya puedes darte algún capricho que entre en ese 20%.

6) Haz ayunos de vez en cuando

Dan claridad mental, es fácil de aplicarlos en dias tranquilos, donde no tienes casi movimiento.

Le darás un respiro enorme a tu cuerpo porque lo dejas descansar un poco luego de estar constantemente procesando alimentos.

Nuestro estado natural es tener salud, el ayuno permite regenerarte y volver a tener energía.La mayoría estamos sobre-alimentados debido al fácil acceso que tenemos a la comida, pasamos el día entero comiendo, aún sin hambre.

De vez en cuando saltéate alguna comida. Por ejemplo si haz pasado la tarde comiendo con la familia, por la noche tomate un té o una fruta, no vuelvas a comer algo que sobre-exiga al organismo.

Hacer un poco de ayuno no significa necesariamente que pases tres días sin comer. Un ayuno simple podría ser por ejemplo comer una sola vez al día de vez en cuando.

Si quieres saber más sobre esto busca información sobre «ayuno intermitente».

7) No solo nos nutrimos de comida

También nos nutrimos cuando dormimos, puedes por ejemplo hacer microsiestas de 15 o 20 minutos, lo cual es mucho mejor que tomar un café o una Coca-Cola. Elije un día de la semana para despertarte de manera natural sin despertadores ni alarmas, duerme a oscuras, siempre a la misma hora, el cuerpo ama la rutina.

Otras formas de nutrirnos es tomando baños de mar, paseos por el bosque (contacto con la naturaleza), respirar aire puro, beber agua limpia, aprender a respirar (evitar respirar superficialmente), tomar un poco de sol en horarios adecuados, estar en silencio, un poco de movimiento : como caminar, nadar suavemente o usar la bicicleta.

8) Disfruta de la vida

No te prohibas de nada pero no abuses de nada. Si estas bien con tu vida puedes tomarte una copa de vino pero no dos litros (porque sabes lo que esa decisión implicaría en tu vida).

Si cuidas los otros aspectos de la vida pero no la alimentación : mal asunto. Del mismo modo si solo cuidas de la alimentación y para nada los otros aspectos de la vida , mal asunto también.

Busca el punto intermedio, conquista tu salud poco a poco, es un proceso a largo plazo de ir incorporando buenos hábitos poco a poco y validando lo que te funciona a tí.

9) Combina bien los alimentos

La trofología es el arte de combinar correctamente los alimentos.

Por ejemplo, si te comes un croissant tu cuerpo sabrá cómo digerirlo, pero si te comes un croissant, un pollo asado y una coca cola al mismo tiempo tu cuerpo se volverá loco y le costará digerirlo porque tendrá que generar sustancias de distinta índole para poder hacerlo y eso le costará mucho trabajo (reducirá tu longevidad).

Por tanto es casi más importante el «cómo» que el «qué». Aprende a combinar bien los alimentos para ayudar a tu cuerpo. Ej: acompañar una presa de pollo frita con una abundante ensalada sería mejor opción que hacerlo con papas fritas (exceso de frito).

PD: ten en claro los enemigos: alcohol, harinas, azúcar, conservantes, lácteos y químicos.

Si esta guía te ha ayudado en tu búsqueda para aprender más sobre alimentación saludable, te agradeceré mucho que hagas click en alguno de los íconos de redes sociales de abajo para apoyar esta web. Haciendo eso me ayudas a seguir. Muchas gracias!

Ahora que tienes un poco más en claro acerca de cuáles son los alimentos más saludables para elegir, sería bueno que leas esta información sobre cómo cocinarlos.

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